Hermann Künig escribió en su guía que desde León hay tres caminos para llegar a Santiago de Compostela. La primera posibilidad consiste en avanzar por Oviedo; allí, el viajero podría conocer el famoso relicario de la iglesia del Salvador. La segunda alternativa consistía en avanzar hacia Astorga y alcanzar el Bierzo, pasando por Rabanal y el puerto de Foncebadón. y la tercera opción, la que recomienda Künig, consiste en tomar el camino de Santa Marina del Rey, avanzando hacia el oeste, dejando Astorga tres leguas al sur, para dirigirse a Ponferrada sin subir montañas, “dejándolas todas a la izquierda”.

Este paso de los Montes de León sin subir montañas existe. Cruza el Órbigo en Santa Marina del Rey; avanza por medio de la comarca de la Cepeda y alcanza el valle del río Tremor desde el entorno de Brañuelas. Con esta vía descrita por el viajero alemán, en lugar de cruzar los montes de León por una cota superior a los 1.500 metros de altitud, lo hará algo más de de los 1.100.

En el alfoz de León había en el final de la Edad Media un gran crucero gótico denominado el Mirador de Trobajo, el punto donde el peregrino se despedía visualmente de la ciudad. Este es el crucero que anunció Künig como punto de bifurcación de los caminos de Astorga y Santa Marina del Rey, «Encontrarás erguida una gran cruz de piedra”, afirmó el monje servita en su Guía. Actualmente se conserva su base pero en una foto antigua se puede apreciar como era realmente.

A día de hoy no es posible coger el Camino señado por Künig desde este punto, tendremos que ir  por el actual Camino Francés hasta San Martín del Camino y allí, justo detrás del albergue municipal, desviarnos hacia la derecha dirección Santa Marina del Rey.